Un poco de memoria
Empezó la campaña electoral (juraría que llevamos toda la legislatura en ella) y dentro de 16 días estamos llamados a las urnas para elegir un nuevo gobierno.
Siempre he creído que este es el momento que el votante ha de tener memoria y repescar lo hecho y dicho tanto por el gobierno como por aquellos que aspiran a desbancarlo.
Debe ser que algunos siguen de carnavales y llegado la hora del voto se van disfrazando del disfraz más adecuado al momento para conseguir nuestro voto. Cierto señor con barbas ahora se ha ataviado de dialogante y de talante, afirma sin ningún tipo de rubor que los que crispan son otros, que la intransigencia es el patrón de otros, que él y su partido siempre están dispuestos al dialogo y el respeto.
Tiro un poco de hemeroteca y me encuentro;
Rajoy calificó a José Luis Rodríguez Zapatero de «irresponsable», de no estar «en sus cabales» y hasta de «bobo solemne» A.B.C.
También le ha llamado sectario, radical, amigo de los terroristas y muchas cosas más que sería aburrido exponer, hemos pasado del España se rompe y la balcanización a ser este país un país muy plural… se ha puesto (y se sigue poniendo) a todas las instituciones del Estado en tela de juicio por no ajustarse a sus deseos. Es sangrante el descaro de estos personajes para vender ahora todo lo contrario que han estado haciendo durante cuatro años.
Y esto no es lo peor (al fin y al cabo, uno se acostumbra a tanta desfachatez) me da más pavor sus propuestas electorales, donde van de la mano meter a niños de doce años en la cárcel, como a vincular sin ningún tipo de reparos a la inmigración (con contrato de integración) con la delincuencia (obviamente solo los latinoamericanos, negros y moros ,pobres) , el miedo como método para conseguir votos, la reducción de impuestos como llave maestra (y sin explicar que pasara con los servicios públicos) todo dentro del populismo más descarado.
Miremos a atrás y no nos dejemos engañar con este festival carnavalero que ha empezado estos días.
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